Éditra

Google, un revuelto de traducción

No le damos importancia a ciertas cosas que en realidad la tienen, siempre vamos a lo fácil, sin preocuparnos de sus consecuencias.

Esta vez ha sido algo gracioso que ha quedado en una anécdota.

Necesitaban 1.500 huevos y utilizaron Google para hacer el pedido.

Google cambió una letra por otra y el pedido se multiplicó por diez.

El equipo Noruego de los Juegos Olímpicos de invierno tal vez pensó que ganaría por huevos.